MADRID,1968
Hace ya medio siglo…el La, la, la de Massiel sonaba en todas las radios y el vermut se hacía en casa y en las tabernas. En ese año nacía Vermut Zarro, el vermut de Madrid.
Carlos Muñecas, patriarca y precursor de toda una saga de vermuteros, llevaba años buscando la combinación perfecta de hierbas aromáticas para infusionar con su vino. Su tesón hizo que finalmente diera con la fórmula secreta del mejor “vermut de grifo embotellado”.
Los 80 llegaron con fuerza…la movida, el plexiglas, los discos de vinilo…corrían nuevos aires y todo aquel que quiso prosperar, lo consiguió. La familia Muñecas lo hizo de la mano de lo que mejor sabían hacer: el vermut. Y así, poquito a poquito, como se degusta un buen vermut, lo que empezó siendo casi un hobby, se convirtió en un modelo de negocio y en una empresa familiar.
El esfuerzo y el trabajo bien hecho siempre dan sus frutos y pronto, y en los 90, Vermut Zarro, el vermut de Madrid, supo colocarse a la cabeza de la innovación, produciendo con la última tecnología, sin olvidarse nunca de lo tradicional, la receta secreta original del mejor “vermut de grifo embotellado”. La familia fue creciendo y añadiendo nuevos productos para adaptarse a los tiempos.